¡CUIDADO!, ES CONTAGIOSA.

La sociedad nos prepara para ser negativos. Si somos negativos estamos más preparados para las guerras, los enfrentamientos ideológicos o religiosos...también más preparados para ser mártires, para sentir miedo, para autodañarnos. Así que hay que utilizar la negatividad que nos rodea y transformarla en positividad. La felicidad se contagia, y quizás de este modo, se propague el virus de las sonrisas.

James H. Fowler y Nicholas A. Cristakis, han hecho un estudio que confirma que la felicidad se contagia hasta los tres grados de separación, es decir, que si un amigo de un amigo es feliz, el tipo en cuestión tiene un 10% de posibilidades de serlo también. Así que, ya sabeis, a rodearse de personas positivas que os contagien las carcajadas y el buen rollo para enfrentaros a cada día.



Foto: http://sferrerobravo.wordpress.com/2009/03/10/el-circulo-del-99/

HACIA RUTAS SALVAJES.

Este libro de Jon Krakauer que acabo de retomar, empecé a leerlo un par de meses antes de partir hacía Alaska, y lo dejé porque me asustaba lo que podía encontrarme, y sobre todo, por si el desenlace final de esta historia podía influenciarme para cambiar de opinión y no partir yo también hacía rutas salvajes.

Cuando abandonamos nuestro entorno "seguro", o donde nos sentimos seguros, porque donde está el cuerpo está el peligro, nos parece que los riesgos se multiplican, y no nos damos cuenta de que en realidad, no existe dicha seguridad, y el miedo hace de las suyas si se lo permitimos.

La información que me llegaba pintaba el lugar como peligroso por su naturaleza salvaje, un lugar acostumbrado a convivir con la muerte, y preferí ahorrar esta información a mi familia para que no me convencieran de lo contrario, para que no influyeran en mí acumulando más miedo en mi alma. Quería hacerlo, vivir la experiencia, recordarme a cada momento lo valiosa y frágil que es la vida precisamente para vivirla con la mayor de las intensidades y enfrentarme a lo desconocido, a todo aquello que hace que sintamos que vivimos seguros en nuestro entorno cuando en realidad es una mentira absoluta.

Este libro narra la historia de Chris Mc Candless, un joven de 24 años que se adentró en abril del 92 en los bosques de Alaska donde fue encontrado meses después, sin vida. Lo dejó todo después de graduarse, desapareció, abandonó sus lazos familiares, su casa, su vida y emprendió su aventura hacía la libertad, hacía la vida nómada.

Muchos fueron los que pensaban de él que era un loco. Yo no sé si estaría loco o no, pero lo que sí sé es que en este libro encuentro pasajes, cartas que escribió a las personas que conoció durante su periplo, que delatan una gran claridad de ideas, y sobre todo, refleja reflexiones que yo misma he pensado en muchas ocasiones, será que también ando un poco tocada de la "azotea". Por eso quiero compartir este pasaje que tomo prestado del libro, porque son palabras con las que me he identificado por completo.

"...deberías cambiar radicalmente de estilo de vida y empezar a hacer cosas que ni siquiera imaginabas o que nunca te habías atrevido a intentar. Sé audaz. Son demasiadas las personas que se sienten infelices y que no toman la iniciativa de cambiar su situación porque se las ha condicionado para que acepten una vida basada en la estabilidad, las convenciones y el conformismo. Tal vez parezca que todo eso nos proporciona serenidad, pero en realidad no hay nada más perjudicial para el espíritu aventurero del hombre que la idea de un futuro estable. El núcleo esencial del alma humana es la pasión por la aventura. La dicha de vivir proviene de nuestros encuentros con experiencias nuevas y de ahí que no haya mayor dicha que vivir con unos horizontes que cambian sin cesar, con un sol que es nuevo y distinto cada día. Si quieres obtener más de la vida deberías renunciar a una existencia segura y monótona."


Tendemos a calificar como locura a todo aquello que no comprendemos o que es diferente de lo habitual.

No hace falta dinero, podemos hacer cada día de nuestra vida diferente, si trabajamos la imaginación.

¿QUIÉN ES?

Ring, ring...

Alarma en el corazón.

Me llaman.

Porque hay lugares que nos llaman, aunque no nos demos cuenta, y vamos a buscarlos, a encontrarnos con esa voz en off que nos dice: "ven, ven, te espero para enamorarte".

A mí estos días me está llamando un sitio al que hace mucho que tenía que haber ido. Mi deuda pendiente que el destino siempre me arrebata dándome giros inesperados y orientando la brújula hacía otros lugares que me llaman menos, aunque igualmente me sorprendan.

Últimamente se ha puesto en marcha un reloj en mi interior que dice: "tic, tac, tic, tac, ¿para cuando me vas a dejar?".

Hay un rincón de este planeta azul que me gusta especialmente, no sé muy bien porqué, porque nunca he estado y tampoco sé si el camino me llevará hasta allí este año, y como todo, el tiempo dirá. ¿A vosotros no os llama ningún lugar?.

Foto prestada de: http://www.diariodelviajero.com

YA ESTÁN AQUÍ.

Para mí, no hay aroma comparable al de un ramito de violetas.

Aunque la vida de estas flores sea efímera, aunque pasen desapercibidas en muchas ocasiones y parezcan delicadas, aunque no sean precisamente ostentosas, son bellas, porque no hay nada tan valioso como lo sencillo.

Las violetas me inspiran poesía y romanticismo. Hoy, alguien me ha hecho llegar el primer ramito de la temporada, y ando por las nubes, para variar, llena de alegría, cual Campanilla cerca de Peter Pan. Está claro, la felicidad está en aquellas pequeñas cosas que hacen nacer en nuestros labios la primera sonrisa del día.

VER SIN MIRAR.

Ayer, llegué a la estación y por dos minutos perdí mi tren, así que me tocó esperar una hora. Una hora que de repente me pareció un mundo entero. Da rabia eso de llegar y ver partir el tren que se supone tenías que coger, pero si llegas y sucede eso, supongo que es porque ese tren no te tocaba en suerte y el azar a veces hace que las cosas sean así. Lo que saqué en claro en esa hora fue:

- Que me es imposible concentrarme en leer un libro porque prefiero observar a los que llegan, a los que les esperan, a los que se abrazan en un encuentro feliz, a los que van y vienen, a los que tienen pis y se encuentran el baño cerrado con llave porque lo están limpiando, a los que reclaman al vigilante de seguridad un poco más de orden, a los que exigen sus derechos y a los que prefieren callar.

-Que hay personas con muy poca paciencia y educación a las que les encanta montar un "pollo" por una nimiedad.

-Que un grupo de turistas jubilados hablaban de mi ciudad de una manera que pensé que se trataba de otro de lugar. Todo depende de los ojos con que se mire, está claro.

-Que tenemos cierta tendencia a hacer comparaciones, y sí, son odiosas.

-Que nos separa un abismo en ocasiones y una línea muy fina en otras.

-Que hay una nueva revista de cocina vegetariana en el mercado.

-Que la bici va en aumento y Renfe prefiere ignorar lo evidente resistiéndose a evolucionar dejando algún rincón de un largo tren, habilitado para los ciclistas.

-Y lo más importante, la lección personal del día que fue el motivo por el que mi tren se fue sin mí, para que sacara esta conclusión, es que vivo acelerada y tengo que aprender a pisar el freno. En ello estoy.

LAS MUJERES SIEMPRE TIENEN LA RAZÓN.

Foto: http://luizcore.wordpress.com/

Ni una cosa ni la otra.

Hoy me he encontrado en una revista, un artículo que habla de Xinmin, un pueblo chino donde van a advertir con carteles, en la entrada del mismo, que: "Las mujeres nunca se equivocan", por lo menos en este pequeño rincón del mundo y sus alrededores.

No se conforman sólo con eso, sino que además, el hombre que ose llevar la contraria a una dama, será penado con trabajos forzosos, yo alucino.

Al final del artículo explica que es una nueva forma de captar turistas, un juego donde los hombres tienen las de perder. Por este motivo, pienso que pocos turistas varones se dejarán caer por ahí si la mujer que tienen al lado de repente se transforma en una dictadora, ¿os imaginais?: "cogeme en brazos que me duele el pie", "qué bonito ese jarrón, ¿a qué es bonito?", "me voy a comprar ese abrigo de un millón de dólares"..., y el señor al lado, "sí, cariño", "tienes razón cariño", más le vale por la cuenta que le trae...

Ni tanto, ni tan poco.

CANDY CANDY.

26 años tienen estos tebeos que veis en la foto. El primer manga que salió en España. Ayer me reencontré con ellos. Los tengo guardados como oro en paño, y no es para menos, porque ya no se encuentran. Me faltan algunos números y casi, casi, que los doy por perdidos, aunque no tiro la toalla y los sigo buscando por internet.

Mi marido me consiguió la serie de dibujos en Dvd, con un sonido fatal, pero ahí la tengo gracias a alguién del Sur de América que me la pudo proporcionar. Es una pena que no la vuelvan a sacar a la venta. Vale que es un poco dramática, pero a mí me parece una historia preciosa con un final que quedó suspendido en la incertidumbre y del que me he enterado hace poco, ya que de buenas a primeras se dejó de emitir y los tebeos dejaron de publicarse por un problema de la autora con no sé quién que terminó en los tribunales, en fin, una verdadera lástima.

ENTREVISTA.

Pues eso, una nueva entrevista en este blog.

BESOS DE PELÍCULA.

Hoy es San Valentín, y aunque sea un día puramente comercial al que le han puesto nombre propio, me gusta. Así que, ya que estamos con el amor en el aire, hoy he decidido poner los que en mi opinión, son los mejores besos del mundo del cine. Hay alguno más, como el beso con la mirada de "El último mohicano", pero bueno, con estos tenemos ya una dosis de romanticismo garantizada.



Este momentazo de la película "Brokeback mountain" es uno de mis preferidos. La escena me transmite muchísimas sensaciones. Para empezar, es un beso muy deseado pero prohibido, mal visto sobre todo en la época y el ambiente que rodea a los protagonistas de la película. Es un beso contenido, de esos que te mueres por dar, de esos que nublan los sentidos, sobre todo el sentido común, donde actúa solo el corazón y desaparece la voz en off que retumba en la cabeza diciéndote que si lo das, tendrás problemas. Una pasada de beso.



"Desayuno con diamantes", beso dedicado a Ardorina porque le encanta la película. Me parece un beso totalmente sensual y excitante, un beso que no admite espera, un maravilloso beso bajo la lluvia.



Una historia de amor ilícita, un beso en la orilla de la playa a espaldas del marido de ella. Burt Lancaster y Deborah Kerr tardaron tres días y necesitaron a 100 personas para conseguir este beso que ha pasado a la historia en el preciso instante en que rompían las olas sobre los amantes. "De aquí a la eternidad".



¿Y este?, ¿qué me decís de este?. Es mi película preferida, así que es un beso que me gusta especialmente, bueno, hay dos besos en esta película que me encantan. En este, Rhett coge por el brazo, casi imponiendo su fuerza a Scarlatta, y la estrecha entre sus brazos mientras ella se resiste un poco para terminar embelesada por el beso, haciendo esa caída de ojos maravillosa que tan dominada tenían las actrices de antes.

En fin, besos para soñar y para practicar, pondría unos cuantos más pero estos son todos una pasada. ¡A disfrutarlos!.

Pd: Añado la foto del beso al que se refiere Ardorina en los comentarios.

DÍAS Y DÍAS.

Siempre he ido haciendo planes, estructurando un poco mi vida, simplemente porque me aporta cierta seguridad tener algo a lo que aferrarme, objetivos en los que concentrarme. Recordando el proverbio árabe que dice “el pasado ha huído y lo que esperas está ausente pero el presente es tuyo”, hoy más que nunca soy consciente de que es una realidad como un templo eso de que lo que espero está ausente. Y esperaba, la verdad es que estaba esperando que sucedieran un par de cosas importantes que se supone iban a poner mi vida del revés. Situaciones nuevas que me iban a llevar directa al norte dando un giro de 180 grados a mi mundo particular. No, nada de eso, el camino de la vida es caprichoso y tiene giros bruscos que se adentran en la niebla impidiéndome ver con claridad algo que me de pistas sobre por donde voy a continuar.

Me encuentro un poco perdida, desorientada, desconcertada e intentando retomar el orden y las riendas que guían mis pasos. Hoy siento que el tiempo es un enemigo y juega en mi contra, así que dadas las circunstancias he decidido aplicarme el cuento y dejar que la vida me sorprenda, pese a que no me han gustado jamás las sorpresas ni los cambios de planes bruscos, me asustan enormemente porque necesito mi tiempo para digerir las cosas. Sobrevivir es adaptarse o eso dicen.

Hay días que te mueres por vivir y días en que parece que andes perdiendo el tiempo. Días de subidas y días de bajadas. Esto es lo más parecido que conozco a una montaña rusa con curvas demasiado pronunciadas. Supongo que la vida es así, difícil en sus cuestas extremas e intensa en los momentos en los que todo sale rodado, en ocasiones resulta un poco mareante y en otras increíblemente divertida.

No penseis que tengo el ánimo por los suelos o que ando baja de moral, para nada. Simplemente estoy aquí, buscando el norte, mi camino. En mi búsqueda he encontrado esta frase que espero me ayude a mí y a todos vosotros a seguir iluminando los días, las horas, los minutos y los segundos; a seguir caminando sin perder un ápice de ilusión y sin olvidar que hay que vivir cada momento como si fuera el último, por si acaso, porque precisamente este suspense que me impide preveer que es lo que va a suceder a continuación, es el que da emoción y cierta sensación de vértigo a esta aventura nuestra, la de ser protagonistas de nuestra propia película.

"Dicen que todo lo que nosotros estamos buscando, también nos busca a nosotros, y que, si nos quedamos quietos nos encontrará. Es algo que lleva mucho tiempo esperándonos. En cuanto llegue, no te muevas. Descansa. Ya verás lo que ocurre a continuación". Clarissa Pinkola, "Mujeres que corren con los lobos".

Foto:http://elabuelodevillaharta.blogspot.com/2008/11/la-hoja-del-calendario.html

RECORDANDO RECUERDOS.

Si entras en un bosque, si sigues el ritmo del mismo, si comprendes los mecanismos con los que funciona la madre naturaleza, si te mezclas con lo esencial, con la realidad, con la sensación de que formamos parte de ella, de que venimos de ella, como todos los demás seres vivos, si se alcanza a comprender que somos parte del todo, que somos muy pequeños, frágiles, mucho más de lo que se pueda imaginar nadie, entonces todo cambia. Es una de las cosas que aprendí en Aniak, que la teoría era tan real como la vida misma, que todo es energía, que un bosque tiene su propio ritmo, hay que respetarlo, integrarse en él y andarse con cuidado porque la naturaleza cuando es salvaje, que es como debería de ser siempre, es muy salvaje y cumple estrictamente con el ciclo de la vida.



Hoy ando pensando en Aniak. Regreso en pensamiento muchas veces a sus caminos pedregosos, a sus árboles, al río, a los salmones saltando en su ruta contracorriente. Es un lugar que ha marcado nuestros corazones. Un lugar difícil, duro, hermoso aunque lleno de espinas. Sin embargo, le debo mucho a este rincón del mundo que me enseñó a apreciar cada plato de comida, la cama donde duermo y sobre todo la vida, por llevarme al límite de mis propios miedos para hacer que me enfrentara a ellos cara a cara, sin máscaras ni escudos improvisados por medio.



La libertad está en nuestras cabezas, dentro de ellas, porque tenemos el poder sensacional de volar sin salir de casa, así que aprovechando esta virtud que nos hace libres, hoy viajo de nuevo hasta allí y me es fácil recordar los olores, la sensación de estar cubierta del polvo que levantaba nuestro paso por los caminos, el estado de alerta en que me sentía inmersa cuando nos adentrábamos en el bosque, la cadena de pensamientos agolpados que se desataban sin control poniéndome mentalmente en todo tipo de situaciones adversas, sacando a flor de piel el instinto de supervivencia, activando las alarmas y los mecanismos de defensa, porque la Alaska rural no es un juego de niños y el bosque tiene sus peligros.



Recuerdo a los nativos con su particular código de conducta, tan diferentes, delante de los cuales no se podían mencionar los osos porque era como invocarlos, lo que piensas lo atraes, era una manera de provocar un encontronazo con ellos, que era justo lo que me pasaba a mí, que me encontraba osos cuando iba a tirar la basura porque no salían de mi cabeza.



"Fuí a los bosques porque quería vivir a conciencia, quería vivir a fondo y extraer todo el meollo a la vida, y dejar a un lado todo lo que no fuese vida, para no descubrir en el momento de mi muerte, que no había vivido"(El club de los poetas muertos). Exactamente así sucedió, así que me siento muy agradecida a esta experiencia increíble que tuve la oportunidad de vivir y ahora de recordar, morriña.

LOBOS.

Me fascinan los lobos, herencia de Félix Rodriguez de la Fuente, a quien le debemos entre otras muchas cosas la supervivencia y el conocimiento del mismo. Creo que si pudieramos ver la naturaleza con los ojos del lobo todo sería completamente diferente, vamos, que otro gallo cantaría. Los indios norteamericanos ven en el lobo un honorable competidor, al que respetan y admiran. Comparto por completo esta admiración.
Creo que hay actitudes y prejuicios equivocados que rodean a este animal, fruto sin duda de la ignorancia. Jamás se puede defender algo que no se conoce. El valor de un ser racional no está en reclamar serlo, sino en ejercer de tal.
Y hoy hago un huequito a los lobos, para que lejos de verlos como enemigos comprendamos que no lo son, que son absolutamente necesarios y también completamente desconocidos. Hermosos lobos.

"No veo al lobo caricaturizado de la fábula, o al halcón envilecido en el parque zoológico, sino como criatura que, a través de la aventura de la vida, comparte con el hombre el destino de la tierra. Una criatura cercana y emparentada con nosotros mismos, victoriosa en una larga y fascinante historia evolutiva(...)Una criatura palpitante, gloriosa como el halcón que cae de las nubes". Félix.

HISTORIAS ANÓNIMAS.

La Marina y yo nos pasamos las horas muertas charlando sobre la vida. Es un lujazo poder disfrutar de esta mujer que habla con una claridad de ideas y con una sabiduría, la del largo camino recorrido, que a mí, personalmente, me enriquece un montón.

El sábado hicimos un chocolatito caliente y nos fuimos a merendar a su casa, a leer en este libro abierto que tenemos por fortuna al alcance de la mano, a aprender y también a disfrutar de la historias que se cuecen en este pequeño rincón manchego, y que Marina nos contó poniendo todo el sentimiento en la palabra.

El verano pasado falleció un matrimonio en su domicilio. Hacía días que nadie los veía y los familiares empezaron a preocuparse ante la falta de noticías. Al final, decidieron llamar a la guardia civil, y al acceder al interior de la casa, encontraron a esta pareja abrazada en la cama, ambos muertos, desde hacía unos días. Cuentan que él estaba muy enfermo y ella llevaba un tiempo anunciando, que el día que él se fuera para siempre, le seguiría. Dicho y hecho. Llegó ese momento, el que ya andaba vaticinado, y ella cumplió con su palabra. Se aseguró de dormirse para siempre entre sus brazos.
La casa estuvo varios meses precintada. Una pequeña casa azul. Cada vez que voy al super, paso por delante e imagino esa clase de amor que hace que nada pueda continuar sin la persona amada.

Otra historia curiosa es la de la novia casada. Hay una mujer que está casada pero se ha echado un novio. Todo empezó una noche en la que ella le invitó a él a cenar, y desde entonces son inseparables. Van los dos calle arriba y abajo hablando abiertamente sobre su recién estrenada amistad. Cuentan que el marido al ser informado de esta relación, reaccionó con indiferencia: "¡que haga lo que quiera!", y eso mismo hace. El escándalo que estas cosas remueven en un pueblo tan pequeño, provoca el nacimiento de los dimes y diretes, que de boca en boca, van engordando en detalles de todo tipo hasta que se hace un montón de un grano de arena.

También ando informada de las novedades de la residencia de ancianos. Uno de los residentes se ha quitado la vida. Se fue sin avisar, y tras dos días desaparecido lo localizaron en su pueblo cuando ya era demasiado tarde. No era muy mayor, así que me da pena que no encontrara otra salida. Cuando alguien decide irse antes de hora, me hace pensar en todos los que se fueron obligados antes que ellos, sin querer marcharse, algunos demasiado pronto. No sé qué clase de energía es esta que nos mueve a cada uno por un camino diferente, con una salida distinta y un final impredecible.

Luego está el cura, que se ha roto la clavícula y no aparece por el pueblo. Sigue sin esconder su manifiesto malestar por tener que dar misa lejos de la "capital". Nadie lo echa de menos ni él echa de menos a nadie. El cura joven que no se deja querer y hacen que todos recuerden con más cariño al anterior.

Así se pasan las horas, hablando y escuchando las historias que se cuecen, que nacen, crecen y se van transformando en leyendas. Historias que se quedan entre las calles estrechas y las paredes blancas de las casas, que circulan en susurros escondidos detrás de las ventanas, que se detienen en el tiempo, colgadas de la memoria, que dan que hablar cuando el silencio es tan habitual que pesa demasiado.

MI POEMA PREFERIDO.

Volvió la vida a latir.



Volvió el alma a delirar.



Volvió el ardor de sentir,



y el infierno de vivir,



y el paraíso de amar.

¡Y YO CON ESTOS PELOS!

Pediría a gritos socorro si sirviera para algo...

¿A quién se le ocurre ponerse a hacer experimentos con los pelos cuando cortan el agua de todo el edificio por una avería durante un día y medio?, a mí, sí. ¿Resultado?, ejem, ejem...

Quería parecer una bruja, de esas que yo imaginaba de pequeña con los pelos rojos. Se me cruzaron los cables, y no se me ocurrió otra cosa que comprarme un champú colorante, muy bonito en la foto, sí, pero muy mal en mi cabeza. No sólo se me ha quedado a trozos, es decir, colorido por un lado y descolorido por otro, sino que encima el rojo es tan rojo que ahora ando con mi melena escondida porque parezco la bruja del Oeste del Mago de Oz, que era perversa.

Mi Pedro se acostó anoche con una pelirroja, pero con un rojo más potente que el que me he colocado en la foto. Menos mal que se va con los lavados...

MARSHMALLOWS.

Era uno de los objetivos para cumplir esta semana, ¿a quién no le gustan las nubes?. Además, son fáciles y rápidas de hacer. A ver si os animais a hacer de cocinitas.

Para empezar, se calientan 200ml de agua en un cazo y cuando esté caliente se añaden 200gr. de azúcar y un sobre de gelatina neutra. Se remueve hasta que se disuelva la mezcla y se sigue añadiendo un sobre de gelatina de fresa y una cucharadita de azúcar avainillado. Se sigue removiendo unos cinco minutos, se vuelca en un bol y se deja enfriar. Se queda como en esta foto.



Cuando la mezcla esté fría, se monta con la batidora hasta que quede como podeis ver en esta imagen.



Se forra un molde con papel de horno para que luego sea más fácil despegar, se vuelca la mezcla y se deja reposar. La receta dice que hasta el día siguiente, pero yo no esperé más que unas horas y no me fue tan mal la cosa.



Despegar, dar forma y meter en una bolsa con azúcar glass para que quede la textura mate y suave de las nubes de verdad. Este paso me lo salté porque consideré que ya tenía suficiente azúcar y la verdad es que tampoco lo he echado de menos.

Están deliciosas, yo diría que más buenas y todo de las que venden por ahí y al menos sabes lo que estás comiendo.

En USA lo que hacen con las Marshmallows, que son su verdadero nombre, es pincharlas con un palito y ponerlas en la barbacoa unos segundos, es algo muy típico y dicen que son exquisitas, así que a ver quien hace la prueba y me lo cuenta.

CURIOSIDAD.

Según un estudio realizado por una empresa de suplementos vitamínicos, el momento más estresante de la semana es el martes a las 11.45, así que respirar tranquilamente que ya queda poco para que llegue esa hora...

LA CUARTA FASE.

Ayer regresamos al cine. Me costó practicamente toda la tarde decidir qué película elegir. Al final, me quedé con dos opciones que durante el camino le fui narrando a Pedro para que me sacara de la indecisión. Llegamos a un acuerdo, y contentísima fui directa a la taquilla a comprar las entradas.

Al indicar al chico que me atendía, que ya debe de conocerme, la peli elegida, me dijo: "No".

Le miré extrañada: "¿Cómo que no?".

Me contestó: "No te la recomiendo", dándome algunas explicaciones.

Me quedé plof, y le pregunté por mi segunda opción.

-"Esa mejor".

Dicho y hecho. La elección improvisada fue "La cuarta fase".

Cuando se avista un OVNI se considera la Primera Fase.
Si se descubren evidencias, se habla de una Segunda Fase.
Si se produce contacto con extraterrestres, se trata de la Tercera fase.
El siguiente nivel, la abducción, es la llamada Cuarta fase.

Toda la sala para nosotros solos.

Empezó la función.

La peli se desarrolla en un pequeño pueblo de Alaska que se llama Nome y hacen hincapié en que está basada en hechos reales, alternando, además, imágenes supuestamente grabadas por los verdaderos protagonistas, con la ficción que reproduce lo que se supone que pasó en Nome.

Un matrimonio de psicólogos estudia los transtornos de sueño de algunos habitantes de este pueblo de Alaska y encuentran unas coincidencias sospechosas.

Muertecita de miedo estuve desde el principio al final, porque a mí estas cosas sobrenaturales me ponen cardiaca y me las creo todas.

Al salir del cine Pedro me dijo: "Y nosotros durmiendo tan tranquilos en la tienda de campaña..." , se refería a nuestro tiempo en Aniak.

Que en Alaska hay mogollón de suicidios, lo sabíamos, pero que eso pudiera relacionarse con otras cosas...

Así que salí de allí abducida, nunca mejor dicho, y así me he pasado la noche, soñando cosas horrorosas de extraterrestres malos y poderosos que me secuestran y me hacen desaparecer de la faz de la tierra.

Esta mañana he empezado a investigar, y me da que no, que es una trola como una casa, aunque tengo dudas por el final de la peli que relata el destino actual de los protagonistas. Con la duda me quedo. A ver si alguien va a verla y me da su opinión que estoy desconcertada.

Perturbadora. Terrorífica. No quiero ver a la lechuza blanca en mi ventana.

Pd: ¡Qué pena que para algunos la tentación no pesara lo suficiente!, nos hubiera encantado compartir estas emociones con vosotros, snif, snif...